Periodistas regañados
Muy pocos medios de comunicación recogieron ciertas palabras de José Silva, jefe de la Misión de Observadores de la Unión Europea, referentes a los medios de comunicación venezolanos. Ni siquiera Venezolana de Televisión lo hizo, y hay una razón comprensible: más que atacar a los medios de comunicación, Silva atacó directamente la forma como se hace periodismo, lo cual afecta ya no tanto a los dueños de medios sino a los periodistas.Así que, en vista de que eso afecta directamente al prestigio de la profesión, los comunicadores sociales venezolanos prefirieron serruchar estas palabras del Sr. Silva y concentrarse más bien en aquellas que podían usarse con objetivos políticos.
Pero como yo no soy comunicador social, sí puedo ponerlas:
- Hay una gran diversidad de opiniones en los medios de comunicación. El aspecto negativo de esta característica es que hay una carga excesivamente emocional y hay colación política.
- No se ha respetado principios periodísticos básicos. No se ha separado información y opinión. No se ha recurrido a varias fuentes. A veces no se han indicado en absoluto las fuentes. La mayoría de los medios favorecieron a una de las dos principales coaliciones de partidos, brindándoles más espacio o una cobertura más positiva. Los medios de comunicación del Estado no cumplieron con sus obligaciones de ser más estrictos. Promocionaron en exceso proyectos de gobierno y dieron por mucho más negativa la información sobre partidos de oposición que a los partidos de gobierno.
- Detectamos un uso excesivo de las cadenas.
Parece que no hemos aprendido absolutamente nada desde que ocurrió el block out informativo el 12 y 13 de abril de 2002 o el paro de diciembre de 2002 y enero de 2003, y más porque la respuesta a la crítica justificada de Silva fue censurar lo que él dijo.
Excelente. Vamos muy bien.
Nada nuevo.
ResponderBorrarEso lo sabemos todos. El periodismo dejó de ser informativo para convertirse en opinión.
En varias oportunidades me he referido exactamente al mismo planteamiento del sacrificio de la información por la opinión.
Ojalá algunos blogs de periodistas hagan eco en lo que se ha planteado por aquí.
Luigino,
ResponderBorrarNo niego, que el caso de los medios del estado se ha ha caído en esta práctica. Pero puedo entender que, siendo minoría, se enfoquen en los elementos que permiten hacerle la guerra a la desinformación de la matriz de opinión generada por los medios comerciales.
Lo que me parece un insulto a la inteligencia, de sus consumidores, es lo que hizo Globovisión con esas declaraciones.
Y como no he visto posiciones críticas con respecto a esas evidentes manipulaciones, por parte de ningún opositor, debo concluir que únicamente son: buenos y sumisos consumidores de medios masivos.
Esto último es algo verdaderamente triste.
Saludos,
Antonio.
para compensar los defectos de uno o dos o tres canales, sirve:
ResponderBorrarTENER UNA MULTIPLICIDAD DE MEDIOS INDEPENDIENTES ENTRE SI, LIBRES DE DECIR LO QUE LES PAREZCA.
Se puede, se abre el espectro a todo el que quiera montar una señal televisiva o radial. Asi tendran todas las opiniones e informaciones que deseen a gusto del televidente. Sin gastar la plata de TODOS los Venezolanos en VIVES, TeleSures, etc...
Sin tener que inventarnos normas sobre normas para "proteger" al televidente de su escogencia.
Estoy de acuerdo con lo que has dicho Lorenzo. :)
ResponderBorrarSólo agregaría alguna regulación menor para limitar la intervención de grandes cadenas, en esos medios que describes.
De lo contrario todas terminaran siendo franquicias locales de FOX -entre otras-, como sucede con las televisoras locales en los EE.UU.
Antonio.
Bueno, yo veo las cosas desde afuera. Y qué veo? Que los medios del estado están absolutamente a la merced del gobierno. Usan al Estado como si fuese su propio partido, no como lo que es, una entidad de TODOS los venezolanos que funciona con fondos públicos. El Minci parece la página personal de Hugo Chávez. Hasta la página de la Asamblea Nacional, antes de las elecciones, parecía la página del MVR. Había incluso un flicker que listeaba todos los candidatos del Bloque de Cambio!
ResponderBorrarSeñores! Eso es vergonzoso.
Que la prensa privada sea mala o malísima, ese es su problema. Al menos la prensa privada es privada, no es pagada con la plata de los contribuyentes venezolanos.
Pero cuando se es gobierno se tiene una mayor responsabilidad: hacer funcionar al país como país, con instituciones fuertes e independientes que estén al servicio de los Chavistas, de los Ni-Nis y de los opositores por igual. Y ser un país es bien distinto que ser la hacienda privada de Hugo Chávez!
Yo creo que este es un asunto complejo dado que en él intervienen diversas variables. A propósito de los comentarios que han sido expuestos con anterioridad quiero hacer algunas acotaciones.
ResponderBorrarLa importancia de variedad de medios independientes entre sí es indudable si se quiere fomentar la pluralidad de criterios y establecer garantías para el mantenimiento de líneas de opinión independientes. Mayor cantidad de medios no significa necesariamente mayor variedad de contenidos, verbigracia lo que está ocurriendo en ciudades como la mía donde hay cada vez más estaciones clones con comentaristas de segunda, transmitiendo el mismo reggaetón y las mismas noticias todo el día.
Aún si hubiera diversidad de líneas de opinión esto tampoco garantiza que estas líneas de opinión calen en las masas y definan criterios ampliamente aceptados. Y adicionalmente está un elemento propio de la teoría de la información, y es que el exceso de este recurso es ruido. El ruido informacional impide discernir entre lo útil y la basura, lo cual a su vez plantea otros retos de organización, clasificación y difusión de la información.
Evidentemente que estas cuestiones forman parte, junto con la actuación de los comunicadores sociales, de un entramado cultural con múltiples interrelaciones y ramificaciones que deberá ser analizado y discutido con más detenimiento y en donde intervienen la educación, la cultura y gustos de las personas, la capacidad de los comunicadores por encontrar un balance entre la funcionalidad y el atractivo del mensaje.
La necesidad de mantener controles también es indudable, no sólo por cuestiones operativas relacionadas con el espectro radieléctrico o por el cumplimiento de la ley de contenidos, sino paradójicamente por el mismo hecho de mantener la diversidad en las líneas de opinión.
Lorenzo señala: "Se abre el espectro a todo el que quiera montar una señal televisiva o radial". Que divertido. Yo quisiera montar mi propia radio también, lo único que me hace falta ahora es conseguir los 500MM+ que se requerirían para armar una estación majunchita.
Estos controles surgen a partir de una de las deficiencias intrínsecas del capitalismo como sistema económico, cuando no se establecen limitaciones para la acumulación de capital (el cual de por sí es beneficioso cuando se usa y se distribuye adecuadamente), más allá del agotamiento de los recursos naturales (y en algunos casos de los recursos temporales).
Tomemos el caso del grupo "Clear Channel Worldwide Inc." en los EEUU. Este grupo es el más grande propietario de estaciones de radio en ese país. En 1995 poseía 43 estaciones pero cuando se eliminaron las restricciones para la posesión de emisoras en 1996 este grupo dio pasos para hacerse con el control de la industria y ahora posee más de 1200 emisoras (incluyendo seis tan sólo en la ciudad de Chicago). En estos momentos Clear Channel controla alrededor de un cuarto de todas las ganancias de la industria (que son unos cuantos miles de millones de dólares al año).
¿Cómo puede un ciudadano (o grupo de ciudadanos) competir con un monstruo así? Y aún si fuera exitoso su intento de establecerse en el mercado ¿Cuál sería el impacto relativo de su mensaje?
En este sentido entiendo y justifico los esfuerzos comunicacionales (incluso de propaganda) del gobierno venezolano. La maquinaria mediática mundial trabaja por roer las bases de cualquier proyecto político-económico-social que pueda alterar el status quo dominante. El gobierno venezolano establece un modelo de contracultura y tiene que hacerlo llegar a las personas dentro y fuera del país. Esto es consecuente con la actuación de TODOS los gobiernos del mundo que hacen propaganda (unos de forma menos transparente que otros. Ver
"EU paga 'noticias' favorables" en torno al soborno de diarios iraquíes por parte del ejército estadounidense, escándalo que reventó apenas la semana pasada pero que ya todo el mundo con dos dedos de frente sabía o se imaginaba desde hace tiempo).
Te equivocas Domingo. La base para la democracia y la paz es tener un estado transparente, con reglas claras que se apliquen de lado y lado y en cualquier circunstancia. Para tener democracia hay que tener un estado con instituciones fuertes e independientes. Dejar el partidismo a los partidos y hacer que las instituciones públicas pertenezcan y funcionen para toda la comunidad, no para un grupo, partido o ideología.
ResponderBorrarCuando el Estado utiliza los recursos de los contribuyentes con fines partidistas y personales está rompiendo esa regla, que es una regla sagrada de una verdadera democracia.
Hoy a lo mejor te parece justificable que por X o Z el estado suplante a los partidos y que se utilicen los recursos públicos de todos los venezolanos para promover o combatir una ideología particular. Pero mañana, si al que suplanta es a un partido o posición que no te interesa, la medida no te parecerá tan conveniente.
Entonces te sentirás agredido en tus derechos, tal como se sienten aquellos que oponen a Chávez en estos momentos.
Es por eso que es tan grave que el gobierno Chavista confunda gobierno con partido.Es simplemente una demostración de falta de democracia.
Lo que bruni señala es cierto y comparto su criterio, particularmente cuando pienso en la democracia como un concepto idealizado. De hecho, sus planteamientos se parecen más a la idea de democracia participativa y protagónica que al de democracia representativa, ampliamente difundida en el mundo y promovida por los EEUU y sus aliados en el mundo. En la democracia representativa se supone que el gobierno es, valga la redundancia, fiel representación de las mayorías y éste asume las decisiones buscando el "bien" del colectivo sobre la base de la "legitimidad" que le otorgaron las elecciones. Por ejemplo cuando el Reino Unido o España fueron a la guerra en Irak, a pesar del rechazo generalizado que la gente manifestó en su momento.
ResponderBorrarSi partimos de la base de la democracia representativa entonces la actuación del gobierno es correcta, lo que no significa que esté bien, por supuesto. Yo particularmente no veo ningún canal de televisión venezolano porque no estoy de acuerdo con ninguna de las posiciones extremas y más que eso, porque me aburren esas posiciones extremas.
Ahora bien, como Antonio señaló anteriormente los medios del Estado son minoría en Venezuela y son una voz emergente aunque solitaria que busca "hacerle la guerra a la desinformación de la matriz de opinión generada por los medios comerciales" no sólo en el país sino en el mundo entero. Un bando ataca y el otro se defiende y contraataca.
Es una dinámica que debe ser detenida eventualmente, pero en este momento ¿qué alternativas se plantean? Es cierto, mi postura política establece un sesgo y justifico la defensa del modelo que hace el gobierno, de la misma forma como otras personas abrazan la idea del libre mercado y la forma como las grandes corporaciones hacen uso de su músculo financiero y su capacidad operativa para apalacar ciertas ideas políticas (como de hecho lo hacen). Hay otras personas que están pensando en poner bombas y matar un gentío lo que es aún peor...
Al final lo ideal sería que tuviéramos un pueblo educado, con fuertes valores morales (donde la gente no sufriera el dilema de ser un "vivo" o un "pendejo"), donde existiera una oposición fuerte y sana que hiciera su trabajo constructivamente y que tuviéramos vecinos bienintencionados que no estén pendientes de conseguir cualquier excusa para decretarnos Estado paria y acribillarnos con sus bombas inteligentes, su fósforo blanco y sus bombas incendiarias MK77.
Como eso no es así entonces debemos discutir acerca de alternativas más allá de lo ideal: cómo conseguir mayor variedad de medios con mensajes también más variados y equilibrados; cómo conseguir que los comunicadores sociales hagan su trabajo y dejen de actuar como opinadores más que como informadores; cómo evitar que las libertades económicas se conviertan en un instrumento para que ciertos grupos económicos impongan sus propias agendas sobre las mayorías; y por último, cómo contrarrestar la campaña de propaganda malientencionada que ataca a Venezuela desde los EEUU y sus aliados en el mundo (incluyendo los que están en Venezuela).
De lo contrario estaremos viviendo permanentemente en el principio de acción y reacción y el gobierno seguramente seguirá usando sus recursos para hacer llegar su modelo de contracultura dentro y fuera de Venezuela tal y como lo hace en este momento.